UNA MUJER CASI PERFECTA

Tras los últimos post son cientos (qué digo cientos, miles, millones) los emails con propuestas de citas que me llegan, con vuestro primo soltero, mejor amigo, hermano, el hijo que es un encanto, vosotros mismos… Si apreciáis este minuto y medio que dedicáis a leerme no lo arriesguéis presentándome a nadie. Soy como Alex Úbago, en cuanto las tías dejaron de putearle su carrera terminó.

De todos modos os comprendo perfectamente, yo me casaría conmigo misma, pero de momento ningún partido político lo contempla. Mi BFF Anne Germain me ha comentado que los espíritus le han dicho que en la República Independiente de Cataluña será un derecho legítimo para todos, igual que esposarse con gallinas y gnomos de jardín. No obstante, los fantasmas dicen que hasta 2036 España será una e indivisible y para entonces, ni a mi ni a mi misma nos sentará bien el blanco, tanto chocolate pasa factura. Así que acabaré soltera como era el plan inicial y mi blog estará a salvo.

De todos modos, he de confesaros que si buscáis perfección en Wikipedia, no aparecerá mi fotografía. La tuve que quitar hace un par de meses porque tengo un par de defectillos que tengo que reconocer. La casi nuera perfecta, la hermana política que todas desearíais padece de incontinencia verbal.

 Hablo, hablo, hablo, hablo… Sin medida, en esos momentos… También. Después de comer no duermo, si quieres siesta te compras tapones y respeto plenamente todas las opiniones pero eso no quiere decir que las quiera oír. Amo el pan, y jamás compartiré mi trozo, pero en cuanto se acabe, que será antes de que me sirvan el primero me como el de al lado. Los chicos con la nariz pequeña no son de fiar, no hay más que ver a Voldemort (esto no es un defecto es una verdad absoluta que todos deberíais saber).

A parte de eso soy perfecta en todos los sentidos y sobre todo humilde.